Quizás este sea uno de los días más apropiados para recordar a Miguel de Molina porque, tal día como hoy, pero de hace 100 años, nació en Málaga, el 10 de abril de 1908, Miguel Frías de Molina.
Con el tiempo llegó a ser una primera figura de la copla y rivalizó, en la época de oro de este género, con los dos nombres de mayor peso y enjundia que ha dado la canción española, Conchita Piquer y Juanita Reina. La rivalidad con la primera traspasó los límites de los escenarios y se alargó en el tiempo, porque Miguel pensaba que la “Piquer”, celosa de sus éxitos, había instigado “para que lo echaran de España”. Pasó mucho tiempo hasta que se convenció de la falsedad de los rumores que, con evidente mala fe, alguien había propalado. En los últimos años de su vida reconoció públicamente, en una entrevista emitida en Canal Sur, su error y eximía a la valenciana de aquellas maledicencias. La artista valenciana, cuando escuchó tales declaraciones, dicen que comentó: “¡A buenas horas, mangas verdes, cuando ya tenemos los dos permiso del sepulturero…!”.

Miguel tuvo una infancia alborotada y creció sin disciplina paterna, pues su padre, zapatero de profesión, adolecía de epilepsia y pasaba largo tiempo convaleciente. Fue expulsado de varios colegios, pasó por el reformatorio, se escapó de casa con trece años, se ganaba la vida haciendo los recados de “la madame” de una casa de citas y, desde hacia ya tiempo, había aflorado su homosexualidad. Vivió en Sevilla los últimos años de los veinte y llegó a Madrid en 1930.
Trabajó de camarero en el colmado “Los Claveles”, en la zona de Sol, y de madrugada frecuentaba el “Villa Rosa”, donde se reunían toreros, “cantaores” y gentes del espectáculo.

Las “Sevillanas del Espartero” fueron incluidas en la película “Pepe Conde”, rodada en 1941, y se convirtió en uno de los mayores éxitos de su repertorio. Miguel de Molina hizo una creación inmejorable, pues salía a escena vestido como un torero, aunque de guardarropía, y adornaba su interpretación con cimbreantes pasos de baile y barrocos pases toreros. La canción, como tantas otras de esa época, es original de esa maravillosa cuadrilla de compositores de copla que fueron Valverde, León y Quiroga.
Manuel García Cuesta El Espartero, nacido en Sevilla el 18 de enero de 1865,

En memoria del intérprete, Miguel de Molina, en el centenario de su nacimiento; en mitad de esta semana de farolillos de la Feria de Abril, en donde las sevillanas reinan, y en recuerdo del protagonista de la canción, El Espartero, uno de los héroes legendarios de la historia de la Tauromaquia, vayan estas:
Sevillanas del Espartero
(Valverde - León - Quiroga)
(Valverde - León - Quiroga)
Las mujeres de Sevilla
merece que se compongan.
merece que se compongan.
Merece que se compongan
las mujeres de Sevilla,
ole, ole, ole, ole,
las mujeres de Sevilla
merece que se compongan.
Merece que se compongan
que se ha muerto El Espartero,
ay, ay, ay, ay,
que se ha muerto El Espartero
para que la quiera ella más.
que se ha muerto El Espartero,
ay, ay, ay, ay,
que se ha muerto El Espartero
para que la quiera ella más.
Vaya una pena que ha muerto
el rey de los toreros de luz,
toca Sevilla entera y se han
teñido los pañuelos de negro
todas las cigarreras.
Al hijo de El Espartero
lo quieren meter a fraile.
Lo quieren meter a fraile
al hijo de El Espartero,
ole, ole, ole, ole,
al hijo de El Espartero
lo quieren meter a fraile.
Lo quieren meter a fraile
y la cuadrilla le dice,
ole, ole, ole y ole,
y la cuadrilla le dice
torero como su padre.
y la cuadrilla le dice,
ole, ole, ole y ole,
y la cuadrilla le dice
torero como su padre.
La Maestranza ya ha puesto
luto en sus balcones
y las banderas a media asta
y hasta mandó poner crespones
en los chiqueros de la plaza.
luto en sus balcones
y las banderas a media asta
y hasta mandó poner crespones
en los chiqueros de la plaza.
Los toritos de Miura
ya no tienen miedo a nada.
Ya no tienen miedo a nada
los toritos de Miura,
ole, ole, ole, ole
los toritos de Miura
ya no tienen miedo a nada.
los toritos de Miura,
ole, ole, ole, ole
los toritos de Miura
ya no tienen miedo a nada.
Ya no tienen miedo a nada
que se ha muerto El Espartero,
ay, ay, ay, ay,
que se ha muerto El Espartero
y el mejor que los mataba.
Y arsa la guasa que te
metiste en la cocina que te
llenaste telarañas que te
pusiste unos botines que con
los tacones de caña.
La verdad es que no se cómo he llegado hasta su blog, pero la cuestión es que yo también tengo uno.
ResponderEliminarEl objetivo de ambos no es el mismo, ya que yo lo he creado como un trabajo de investigación, el tema del cual es las canciones de posguerra, su análisis y la historia de ésta.
He visto que tiene algunas entradas que me podrían ayudar en mi búsqueda, así que agradecería que me contestara el comentario para poder mantener cierto contacto con usted.
Gracias!
Hay un error en la letra que se publica aquí: al principio donde dice "para que la quiera aún más", el original dice "para que las quiera El Bomba".
ResponderEliminar"El Bomba" es otro torero de la época (Emilio Torres Reina), hermano mayor de Ricardo Torres "Bombita" y de Manuel Torres "Bombita Chico".
Toda esta dinastía, son tios abuelos míos.
Para comprobar la letra, pueden ver el video de YouTube que incluyen ("Miguel de Molina, sevillanas del Espartero"), donde sale una imagen de "El Bomba" cuando lo nombra Miguel de Molina.